Felipe Aránguiz es el Director de Business Development de Instantly, una de las plataformas más potentes del mundo para automatizar correos en frío. Con más de 20.000 empresas usándola a nivel global, Instantly está revolucionando la forma en que se escala outbound sin quemar el dominio y sin caer en spam.
En el último año, solo usando este canal, Felipe y su equipo generaron más de $1.9 millones en oportunidades. Sin levantar inversión. Sin promesas vacías. Sólo ejecución.
Si alguien puede hablar con autoridad sobre cold email, es él.
Durante los últimos 10 años escuché la misma frase una y otra vez:
“El correo en frío está muerto.”
Y sin embargo, hoy te puedo decir lo contrario. No sólo sigue funcionando: es el canal que más revenue nos generó en Instantly.
En este artículo te quiero contar por qué sigue funcionando, por qué la mayoría lo está usando mal, y cuáles son los 4 pilares que usamos nosotros para escalarlo.
Empecemos por el primer error.
El correo en frío no es para vender
Este es el primer error que cometen casi todos.
Se acercan al correo en frío como si fuera un pitch. Envían un mensaje, pegan su link de Calendly, y esperan que alguien se agende. No funciona así.
El correo en frío no está para cerrar. Está para abrir.
Abrir una conversación. Un hilo. Una relación. Porque nadie quiere casarse en el primer mensaje.
Siempre uso la misma comparación: mandar un correo en frío pidiendo una reunión es como ver a alguien que te gusta en la calle y decirle “¿Nos casamos?”. Solo funcionaría si fueras Brad Pitt. Y ni así.
Lo que sí funciona es lo otro: dar el primer paso, romper el hielo, y ver si la conversación fluye. El objetivo del correo no es cerrar nada. Es abrir algo.
Otro error: pensar que el cold email es spam
Vamos a derribar otro mito.
El correo en frío NO ES SPAM. A menos que lo uses mal.
Spam es mandarle algo irrelevante a alguien que no pidió nada. Cold email es escribirle a la persona adecuada, con un mensaje que le importa. La diferencia está en la segmentación.
Nosotros la hacemos en tres niveles:
Cuando estos tres factores están alineados, la conversación fluye. Porque hay match desde el minuto uno.
Ahora vamos a la parte ejecutable. La que más importa.
Cómo hacer que el cold email funcione
Ahora sí, cómo se construye una campaña que realmente genera respuestas.
Todo se reduce a cuatro pilares. No hay atajos.
1. La infraestructura
Este es el primer paso y el que muchos ignoran.
El error más común es enviar correos en frío desde el dominio principal de tu empresa. Si alguien marca ese correo como spam, afecta directamente la reputación del dominio. Y si ese dominio es el que usas para hablar con clientes reales, básicamente estás arruinando el canal más importante de tu negocio.
Para evitarlo, nosotros usamos dominios alternativos.
Por ejemplo, si el dominio principal es empresa.com, registramos variantes como tryempresa.com o empresaHQ.com y usamos esos para las campañas. En cada uno de esos dominios creamos entre dos y cinco cuentas de correo, lo que nos permite distribuir el volumen y mantener todo bajo control.
Además, nunca enviamos más de 30 correos por cuenta por día. Es el límite que descubrimos que mantiene la deliverability alta y los riesgos bajos.
¿Quieres escalar a 1.000 correos por día? Necesitas 10 dominios, con 3 cuentas activas cada uno. Así de simple.
2. El asunto
Antes de que te lean, tienen que abrirte. Y para eso, el asunto es todo.
Un buen asunto despierta curiosidad o comunica urgencia. Pero sin manipular.
Algunos formatos que suelen funcionar bien: